Los expertos predicen que los automóviles autónomos, eléctricos, y fabricados mediante Impresión 3D serán más ecológicos, más personalizables y más seguros que los actuales.
El nuevo LSEV de XEV no es autónomo, pero es eléctrico y todas sus piezas visibles están fabricadas mediante Impresión 3D, excepto el chasis, los asientos y el vidrio.
El automóvil fue desarrollado en colaboración con el fabricante chino Polymaker, que fue responsable de la investigación, desarrollo y fabricación del material utilizado para imprimir en 3D.
Beneficios Directos
En el caso concreto del LSEV, los beneficios directos reportados por XEV en comparación con un vehículo fabricado tradicionalmente, se resumen de esta manera:
Reducción de piezas: De más de 2.000, a tan sólo 57
Reducción del tiempo de I+D: En torno al 60%
Reducción del coste de I+D: En torno al 70%
Reducción del peso final del vehículo: En torno al 60%
"Mientras que el proceso de investigación y desarrollo de un modelo de automóvil tradicional requiere de 3 a 5 años, en el caso de los modelos fabricados mediante Impresión 3D este proceso requiere 12 meses como máximo", afirma Luo Xiaofan, fundador y CEO de Polymaker.
El LSEV ha recibido ya más de 7.000 pedidos anticipados, efectuados en su gran mayoría por clientes particulares, aunque también por ciertas empresas entre las que merecen destacarse la empresa de alquiler de vehículos Arval y el servicio de correos Poste Italiane.
No hay comentarios:
Publicar un comentario