¿Existe una "Hoja de Ruta" para que las imprentas comerciales incorporen la Impresión 3D a su portfolio de servicios?
La respuesta es bien simple: No existe una "Hoja de Ruta", como tampoco existe una hoja de ruta para aprender a nadar.
Puedes darle las vueltas que quieras, analizar pros y contras, leer aquí y allá, preguntar a éste o al otro, puedes verlo más o menos claro, pero lo que es evidente es que si de verdad te quieres meter en este negocio, tienes que meterte de verdad: Es algo tan simple como explorar las necesidades de tu base de clientes actual, y ver cuántos de ellos podrían estar necesitando servicios de Impresión 3D.
Cuentas con la confianza de tu cliente. ¿Qué te impide preguntarle si podría interesarle este tipo de servicios? No tienes nada que perder, y podrías llevarte más de una grata sorpresa: Posiblemente tu cliente necesitaba imprimir en 3D, y hasta el momento ni se lo había planteado. A partir de ese momento, empieza un nuevo proceso de venta consultiva, en el que entras más a fondo en sus necesidades. Tienes que asesorarle sobre qué solución necesita para esa necesidad, y mostrarle los beneficios directos que puede obtener del nuevo servicio que le estás ofreciendo.
Probablemente pienses que esa tarea te supera, que no entiendes de 3D, y que te va a tocar estudiar y reciclarte. Y estás "casi" en lo cierto: No entiendes de 3D, tienes que ponerte a estudiar, y debes reciclarte. Pero sólo te superará esta tarea si tú te dejas superar por ella. En cualquier caso ten presente que se trata de una tecnología relativamente nueva, y nadie nace sabiendo.
La respuesta es bien simple: No existe una "Hoja de Ruta", como tampoco existe una hoja de ruta para aprender a nadar.
Puedes darle las vueltas que quieras, analizar pros y contras, leer aquí y allá, preguntar a éste o al otro, puedes verlo más o menos claro, pero lo que es evidente es que si de verdad te quieres meter en este negocio, tienes que meterte de verdad: Es algo tan simple como explorar las necesidades de tu base de clientes actual, y ver cuántos de ellos podrían estar necesitando servicios de Impresión 3D.
Cuentas con la confianza de tu cliente. ¿Qué te impide preguntarle si podría interesarle este tipo de servicios? No tienes nada que perder, y podrías llevarte más de una grata sorpresa: Posiblemente tu cliente necesitaba imprimir en 3D, y hasta el momento ni se lo había planteado. A partir de ese momento, empieza un nuevo proceso de venta consultiva, en el que entras más a fondo en sus necesidades. Tienes que asesorarle sobre qué solución necesita para esa necesidad, y mostrarle los beneficios directos que puede obtener del nuevo servicio que le estás ofreciendo.
Probablemente pienses que esa tarea te supera, que no entiendes de 3D, y que te va a tocar estudiar y reciclarte. Y estás "casi" en lo cierto: No entiendes de 3D, tienes que ponerte a estudiar, y debes reciclarte. Pero sólo te superará esta tarea si tú te dejas superar por ella. En cualquier caso ten presente que se trata de una tecnología relativamente nueva, y nadie nace sabiendo.
ERRORES MAS FRECUENTES EN LOS QUE CAEN LOS EMPRESARIOS DEL SECTOR GRAFICO A LA HORA DE PLANTEARSE EL 3D
El error más común en el que caen la gran mayoría de los empresarios del sector gráfico, estriba en creer que la impresión 3D consiste en darle a un botón, para que empiecen a salir piezas como churros.
Es un error, porque aquí no se trata de producir muchas unidades iguales, sino de producir muchas unidades distintas. El beneficio está en el ahorro de costes y tiempos que se consigue respecto de obtener esa pieza mediante el método tradicional.
Es como si yo les planteo que quiero obtener... un sólo libro de cien páginas, impreso en una rotativa y encima de huecograbado. ¿Se puede? Si, claro que se puede. Pero estaremos de acuerdo que resulta más económico y más rápido obtener ese libro único mediante impresión digital. Pues lo mismo con la Impresión 3D.
Es un error, porque aquí no se trata de producir muchas unidades iguales, sino de producir muchas unidades distintas. El beneficio está en el ahorro de costes y tiempos que se consigue respecto de obtener esa pieza mediante el método tradicional.
Es como si yo les planteo que quiero obtener... un sólo libro de cien páginas, impreso en una rotativa y encima de huecograbado. ¿Se puede? Si, claro que se puede. Pero estaremos de acuerdo que resulta más económico y más rápido obtener ese libro único mediante impresión digital. Pues lo mismo con la Impresión 3D.
Otro error muy común es creer que aquí manejamos PDFs, o JPEGs. No señor: En Impresión 3D se manejan STLs (VRMLs para el caso de multicolor). Al llegar a este punto hay muchos empresarios y profesionales que se bloquean mentalmente, ponen cara de no entender nada, y cometen el error que veremos a continuación. Se diría que piensan: "Déjalo, esto me supera, yo sigo con lo mío que es lo que conozco". En cualquier caso, dejan pasar una oportunidad que estaba llamando a su puerta.
El tercer error más común, es poner como excusa "De momento nadie me lo ha pedido" para dejar en vía muerta esta posibilidad. Estos empresarios deberían recordar que el único servicio que no se vende es aquel servicio que no se ofrece. Si nunca han ofrecido servicios de Impresión 3D, es normal que no les hayan pedido imprimir en 3D. Sólo cuando empiecen a ofrecer servicios 3D, podrán esperar que les pidan servicios de Impresión 3D.
El cuarto error más frecuente entre los empresarios de Artes Gráficas es olvidar que son empresarios, que significa emprendedores. Piensan que como no ven papel, pues ya no es impresión. Es verdad que no es impresión tal como la conocen, pero ellos son empresarios, y aquí hay negocio. Es una pena cuando te encuentras con empresarios tan cerrados, porque te das cuenta de que están dejando pasar una oportunidad de negocio como pocas. Quizá les sobre el dinero, quizá no se ven capaces de meterse con ello, quizá les sobre resistencia al cambio... En cualquier caso, otro empresario lo aprovechará.
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