Cuando pensamos en Impresión 3D, solemos asociarla con aplicaciones relacionadas con la industria aeroespacial, la automoción, u otras areas relacionadas con la ingeniería. Sin embargo, existen ciertas aplicaciones no tan relacionadas con la ingeniería pura y dura, que no por ello merecen menos atención. Una de ellas es la creación de personajes de animación para la industria del cine, y de ese tema vamos a hablar en este post.
Stop Motion
El Stop Motion es una técnica cinematográfica basada en filmar cuadro a cuadro los movimientos de los personajes, de manera muy similar a las primeras cintas de dibujos animados. Ahora bien, hay que tener en cuenta que las secuencias basadas en esta técnica son creadas tomando imágenes de la realidad, por lo que estamos hablando claramente de algo que nada tiene que ver con los dibujos animados ni con la animación por ordenador.
Se trata ante todo de una técnica artesanal, debido a que se ha de construir cada movimiento cuadro a cuadro, manipulando un objeto con las propias manos. Es por esto que cada secuencia puede convertirse en un trabajo tan arduo como caro. Sin embargo, las nuevas máquinas de Impresión 3D multicolor y multimaterial en alta definición, están posibilitando a los directores y productores obtener extraordinarias filmaciones en un tiempo y a un coste imposibles de obtener anteriormente.
Un buen ejemplo lo encontramos en Laika, estudio de animación que utiliza con éxito la Impresión 3D para conseguir secuencias de extraordinario realismo cuyo valor diferencial estriba, entre otros aspectos, en el impresionante acabado visual de sus personajes.